La tija de sillín es el tubo que sostiene el sillín de una bicicleta.

Una pieza clave para posicionar el sillín en la altura, avance y/o retraso correctos, de tal manera que nuestra pierna ejerza la fuerza máxima en cada pedalada.

Actualmente hay 3 materiales de construcción: acero, aluminio, carbono.

Y una infinidad de largos,  y afortunadamente los diámetros disponibles en el mercado empiezan a reducirse.

¿Quieres mejorar la calidad de tu tija?

¿Buscas un largo diferente?

Te damos las pautas para que puedas hacer una selección rápida en el siguiente vídeo, y unos consejos extra en el resto del artículo.

¿QUÉ HERRAMIENTAS NECESITO  PARA MONTAR UNA TIJA DE SILLÍN?

Llaves Allen: no hay una medida exacta. Cada fabricante hace una propuesta de diámetros de tornillería, tanto en el cierre de sillín, como en la tornillería de la base de sillín.

Por lo cual es recomendable disponer de un juego de llaves Allen con varias medidas.

Llave dinamométrica: si quieres llegar ajusto al par de apriete indicado por el fabricante, lo mejor es utilizar una llave dinamométrica.

Calibre: ¡Acierta a la primera! Si no sabes el diámetro de la tija de sillín que necesita tu bicicleta, mide el interior de tubo de sillín con un calibre.

Escariador: en ocasiones la tija no entra en el tubo de sillín. Si el diámetro coincide, puede ser que existan rebarbas metálicas. Es el momento de pasar un escariador por el tubo y suavizar la pared interna.

Grasa: aplica una fina película de grasa hidrófuga en el interior del tubo de sillín. Doble objetivo: facilitar la entrada y evitar crujidos más tarde.

Pasta para carbono: si estás montando una tija de sillín fabricada en carbono, no utilices grasa.

Lo idóneo es utilizar pasta especial para carbono.

PREGUNTAS Y RESPUESTAS

 

¿Te ha gustado el vídeo?
¿Tienes alguna pregunta?

Escríbenos y te respondemos.

bicicletas-en-stock